Cómo hablar con el trabajador social de su centro regional cuando tiene problemas con su casero

💭 ¿Te sientes atrapado entre las necesidades de tu hijo y tu situación de vivienda?

Si tu arrendador está haciendo tu vida difícil—ignorando reparaciones, entrando sin aviso, amenazando con desalojarte porque tu hijo es “demasiado ruidoso”—es posible que no sepas qué hacer.

Pero aquí está la verdad: no tienes que manejarlo solo.

Tu trabajador social del Centro Regional puede ayudar—pero sólo si entienden lo que está pasando y cuán grave es.

Vamos a repasar qué decir, qué pedir, y cómo protegerte.

📞 Paso 1: Pide un Control Relacionado con la Vivienda

Llame, envíe un mensaje de texto o un correo electrónico a su trabajador social y diga:

“Hola, estoy teniendo algunos problemas con mi arrendador que están afectando la estabilidad de vivienda de mi hijo. ¿Podemos programar un tiempo para hablar? Creo que podría necesitar ayuda para pedir una acomodación relacionada con la vivienda.”

Esto les dice que hablas en serio, y que podrías necesitar una carta, un defensor o un proveedor de vivienda.

📋 Paso 2: Sea Claro Acerca de Lo Que Está Pasando

Utiliza palabras simples. No te contengas. Aquí hay un guion que puedes seguir:

“Mi arrendador está amenazando con desalojarnos. Creo que es porque mi hijo tiene crisis a veces. Él tiene autismo, y esto es solo parte de su condición. También han ignorado varias solicitudes de reparación. Tengo miedo de enfrentarme porque no quiero perder el apartamento.”

O:

“Nos dijeron que no podíamos tener terapeutas que visitaran más porque es demasiado disruptivo. Pero esas visitas son parte de nuestro plan de servicio.”

🧠 Paso 3: Pide Estos Apoyos

Puedes decir:

📝 1. “¿Puedes escribir una carta de acomodación razonable?”

Explicando que:

• Tu hijo tiene una discapacidad

• Ciertos comportamientos o necesidades de servicio están relacionados con la discapacidad

• Estás pidiendo que el arrendador permita acomodaciones (visitas, modificaciones, excepciones a ciertas reglas)
  
  

👩‍💼 2. “¿Puedes ayudarme a conectar con un defensor de vivienda o trabajador de ILS?”

Algunos Centros Regionales contratan agencias que pueden:

• Hablar directamente con los arrendadores

• Ayudarte a documentar tus derechos

• Incluso asistir a audiencias o mediaciones
  
  

🧾 3. “¿Podemos agregar estabilidad de vivienda a mis objetivos de IPP?”

• Esto pone tu situación de alquiler actual dentro de tu plan de caso formal

• Le da a tu coordinador de servicio una razón para hacer seguimiento

• También te permite solicitar recursos específicos de vivienda o apoyo de emergencia
  

🛠 Paso 4: Comienza un Registro (Juntos)

Pide:

“¿Puedo enviarte un resumen de lo que ha estado sucediendo para que tengamos un registro escrito?”

Luego envía un seguimiento como este:

“Gracias por hablar hoy. Aquí está lo que estoy enfrentando:

El arrendador nos ha estado amenazando con avisos. He tenido problemas para conseguir que se realicen reparaciones. Los comportamientos relacionados con la discapacidad de mi hijo parecen ser parte del problema. Espero que podamos obtener una carta o ayuda para solicitar acomodaciones.”

✊🏽 Recuerda: No Estás Pidiendo un Favor

Tu hijo tiene derecho a:

• Un hogar estable

• Servicios de apoyo médico y conductual

• Vivienda que no lo castigue por ser discapacitado

Y tú tienes derecho a:

• Reparaciones

• Paz

• Protección contra represalias

Si tu arrendador viola esos derechos, y tu trabajador social apoya tus necesidades de vivienda por escrito, estarás mejor preparado para:

• Enfrentar legalmente

• Obtener ayuda de LAFLA o el Centro de Derechos de Vivienda

• Documentar violaciones para quejas ante HUD o CRD